El Acueducto del Águila

Acueducto del Águila (Nerja). Lado norte (fotografía del autor)

El día 29 de noviembre un ciudadano de Nerja publicaba una fotografía en Facebook alertando de los vertidos de tierra que se estaban realizando en la cara norte del Acueducto del Águila; ese mismo día la Asociación “La Volaera” se hacía eco en su blog y en las redes sociales de la agresión al monumento y el día 30 se puso en contacto con la concejala de Cultura, Gema García Rojo, quien intervino con celeridad, según se informa en la web del Ayuntamiento de Nerja. Deseo y confío que nuestras autoridades municipales resuelvan el caso conforme establece la normativa reguladora de protección de bienes culturales, depurando las responsabilidades a que haya lugar, y haciendo que se devuelva al estado anterior a la agresión toda la parte del acueducto afectada por la misma. Como me parece importante que se conozca tanto la historia del acueducto como la normativa que lo protege, doy a continuación algunas notas.

El Acueducto del Águila, así llamado por la veleta en forma de águila bicéfala que lo corona, fue promovido por Joaquín Pérez del Pulgar y Ruiz de Molina, propietario de Maro, hacia 1860 para conducir el agua de riego a las tierras del tablazo y vega de Maro que había ido adquiriendo entre 1858 y 1859, con objeto de constituir una colonia agrícola (la Colonia Agrícola Las Mercedes y Maro) salvando así el desnivel producido por el barranco de Maro. Unos años después,  a partir de 1879, también surtiría de agua a la fábrica azucarera “San Joaquín”, establecida en dichas tierras. La construcción se debe al entonces maestro de obras del Ayuntamiento nerjeño, Francisco Cantarero Martín, según reza en una inscripción junto al canal del acueducto, y debió realizarse con anterioridad a 1864, pues ya figura en un plano fechado en dicho año.

Al adquirir los Larios en 1930 todas las propiedades de Maro pertenecientes a los Pérez del Pulgar, el acueducto pasó a pertenecer a dichos empresarios o a la sociedad que ellos constituyeron, la Sociedad Azucarera Larios, S.A. (SALSA). En febrero de 2005, SALSA cedió el acueducto al Ayuntamiento de Nerja, siendo en el presente un bien de propiedad municipal.

Acueducto del Águila (Nerja). Lado sur (fotografía del autor)

El acueducto, del que se conserva un dibujo realizado por el propio Joaquín Pérez del Pulgar, es una magnífica obra de ingeniería que pertenece a la arquitectura industrial; mide unos 100 m de largo y 52 m de alto y tiene 36 arcos de medio punto peraltados, realizados en ladrillo, repartidos en cuatro niveles.  Por la parte superior discurren dos canales, uno central abierto y otro oculto, embutido en el pretil del lado sur. El canal mayor atraviesa un templete coronado por un airoso pináculo, mientras que la cara norte es la que presenta un aspecto más ornamentado, pues era la que quedaba a la vista, ya que antes de que se construyera la CN 340 el antiguo camino que iba a Almuñécar atravesaba el barranco por el norte del acueducto; así, el alzado norte se halla decorado con bolas sobre peanas de ladrillo y la cara norte tiene arcos ciegos de herradura apuntados o tímidos, aunque con nitrados polilobulado.

El acueducto se fue deteriorando con el paso del tiempo y perdiendo el color que lucía en sus primeros años, por lo que en 2011 fue sometido a una restauración en la que, entre otras cosas, se recuperó la policromía original del mismo (almagra para el ladrillo, blanco de cal para el llagueado y ocre para el enlucido que cubre la mampostería) y la decoración de bolas sobre peanas en el pretil.

Acueducto del Águila (Nerja). Canal (fotografía del autor)

La protección de este bien data del año 1968. Unos años antes, en 1961, se declaraba la Cueva de Nerja Monumento artístico y con objeto de proteger su entorno, el gobierno publicó el Decreto 1288/1968, de 11 de mayo, por el que se declara Paraje pintoresco a los alrededores de Maro-Cueva de Nerja en la provincia de Málaga. En este decreto se fijaban los límites del paraje que eran: por el Norte, los pinos; al Sur, el mar; al Este el arroyo del Campillo (conocido por el nombre del Sanguino); y al Oeste, por el barranco de Maro. Por lo tanto, el acueducto quedaba dentro del ámbito protegido por la citada norma.

Posteriormente, la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español, en su Disposición adicional primera, concede la categoría de Bien de Interés Cultural (BIC) a determinados bienes, entre los que se encontraba el citado Paraje pintoresco que quedaría catalogado como Sitio histórico. Tanto la ya derogada Ley 1/1991, de 3 de julio, como la vigente Ley 14/2007, de 26 de noviembre, del Patrimonio Histórico de Andalucía, incorporan todos los bienes protegidos por la ley estatal. En el caso de los sitios históricos, como es el de Maro, se obliga a establecer un plan especial de protección, por lo que el Ayuntamiento de Nerja aprobó en agosto de 2013 el Plan Especial de Protección del Sitio Histórico Paraje Pintoresco de Maro, en cuyo Catálogo de Bienes Protegidos figura el Acueducto del Águila con un nivel de protección integral. Asimismo, el Plan General de Ordenación Urbanística de Nerja, que data del año 2000,  actualmente en vigor, recoge la protección arquitectónica del acueducto incorporándolo al Inventario de Bienes de Patrimonio Cultural y Arqueológico de Nerja.